Por segundo año consecutivo el Atléti estará en el bombo de la máxima competición continental después de encajarle dos goles a un pobre 'Pana' cuya moral se desintegró en el minuto 3 cuando Vyntra en una desafortunada acción se equivocó de portería para inaugurar el marcador tras un potente tiro de Forlán que se iba desviado.
A partir de ahí, los helenos abatidos y sin muchas posibilidades y el Atléti con un 4-2 global durmireron un partido cerrado que se convirtió en un aburrimiento inevitable para un fútbol al que le faltaban dos cosas fundamentales: emoción y goles.
La segunda parte continuó igual y se empezaron a escuchar los primeros pitos de la escasa entrada que presentaba el Calderón.
La situación todavía se puso peor y el aburrimiento amenazaba con matar cuando el colegiado holandés mandó a las duchas a Cissé tras una entrada más aparatosa que dura sobre Assunçao.
Pero a siete minutos del final apareció esa persona cuyo fútbol va por otro lado y que tiene la capacidad de convertir los pitos de la afición en aplausos en menos medio minuto y de la nada. Y es que los rojiblancos tienen mucha suerte de contar con el Kun que mejor que nadie se mereciá insicribir su nombre en la historia al marcar con su gol el 100 de su euipo en Europa.
La genialidad del de siempre salvó de nuevo a la presidencia de una pitada e hizo olvidar a todo el mundo la gran falta de refuerzos que hacen falta si se quiere sobrevivir en la tres competiciones.
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